Los que dejan huella - 20 historias de éxito empresarial - page 18-19

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Sicilia en la Bodega, explotación de aparcamientos, seguridad, infraestructu-
ras de telecomunicaciones, de nuevas tecnologías...
En los últimos años, tanto en España como en Francia, seguimos incorpo-
rando explotaciones de redes de transporte urbano en ciudades como Alcoy,
Albacete, Cáceres y, muy recientemente, Mérida, capital de Extremadura.
Cuando vine a Alicante, me enamoré de un paraje precioso enNovelda, a poca
distancia de Alicante y, desobedeciendo los consejos de mi padre de que no invir-
tiera nunca en fincas rústicas, compré aquel entorno llamadoCasa Sicilia, con una
casa de más de 300 años y una finca con más de 400 de historia cuya actividad
principal era el viñedo de uva demesa, típica en esa comarca del Vinalopó que tie-
ne la particularidad de que la maduración la realiza resguardada por una bolsa de
papel que recubre cada racimo y la protege del sol y de las enfermedades.
Con el tiempo hemos ido haciendo mayor la finca inicial comprando otras
limítrofes, pero la verdad es que nunca han salido “los números” aunque llega-
mos a producir más de un millón y medio de kilos en un año.
Tentado por mi primo, Tomás Santacruz, un químico riojano licenciado
como enólogo entre los albariños y godellos de Galicia, con la esperanza de que
la barrica y la botella prolongaran la oportunidad de conseguir un mejor mer-
cado para los frutos de la vid, nos animamos a plantar varietales de vino, desde
el albariño de nuestra morriña, con una perfecta adaptación a nuestro paraje, a
las autóctonas por excelencia, la monastrell tinta y la moscatel blanca, y otras
escogidas de entre las más finas y apreciadas en todo el mundo de la viticultura,
plenamente adaptadas a esta zona mediterránea. Recuperamos así la tradición
de años atrás de cultivar y elaborar vinos en Novelda, que se había perdido por
culpa de la filoxera y no había cogido de nuevo el tren hasta mediados del siglo
XX, influenciada por el impulso de la uva de mesa.
La buena experiencia de tres buenos amigos, David Álvarez, alma máter de
Vega Sicilia, Mariano García, que fuera enólogo de aquella y fundador de las
Bodegas Mauro y San Román y Bernardo Luna (Bodegas Luna Berberide en El
Bierzo), me animó a apostar ya en serio por la enología y contratamos a un joven
enólogo francés, Sebastien Boudon, con quien continuamos creciendo hasta la
actualidad, con un proyecto de pequeñas producciones de vinos de calidad, con
algunos muy apreciados y reconocidos como el Ad Gaude, un tinto de 24 meses
de crianza que en el 2008 obtuvo la distinción de “Mejor Tinto del año” por El
Mundo (elmundovino.com) y el Cesilia Rosé premiado por Verema.com como
“Mejor rosado” del año 2009.
Con el crecimiento de la actividad de la bodega iniciamos hace unos años
un proyecto paralelo de enoturismo, uno de los mejores de la Comunidad
Valenciana, abriendo las puertas de nuestro entorno para compartir con los
aficionados al mundo del vino y de la naturaleza las tradiciones de nuestros an-
tepasados, nuestra vocación de servicio y nuestros vinos, en unmarco incompa-
rable para celebrar una boda o cualquier evento.
Con más de 80 años, Joaquín Arias no tiene dudas sobre la receta del buen hacer
empresarial: disfrutar del trabajo, mover el dinero con cabeza y rodearse de un
buen equipo. Así, es posible fijar estrategias, tener visión de futuro y enfrentarse a
los acontecimientos más importantes.
Hay que enamorarse de lo que uno hace. Mejorarlo día a día produce una gran
satisfacción y, cuando sale mal, hay que levantarse y volver a empezar, apren-
diendo de la experiencia. El dinero, si se tiene, hay que moverlo con cabeza y
rodearse de un buen equipo. Es fundamental que el equipo piense igual que
tú, aunque no está mal que te lleven la contraria alguna que otra vez. Escuchar
otras opiniones nunca es malo. Así lo he hecho toda mi vida y no me arrepiento.
La clave de un buen servicio es la coordinación de los diferentes modos de
transporte que operan en una ciudad o en un área metropolitana. Ese es el con-
cepto que hoy se maneja en el sector. Es muy importante coordinar los servi-
cios: en algunos lugares va muy bien el tranvía, en otros es más razonable el au-
tobús o la plataforma reservada, una calle exclusiva para el transporte cada vez
más implantada como alternativa al tranvía en Sudamérica, Europa y España,
con un coste menor que el del tranvía y prestaciones similares en términos de
frecuencia y calidad del servicio.
Yo no soy un visionario, pero sí considero que tengo intuición para los ne-
gocios y no he tenido inconveniente en diversificar y emprender algunas aven-
turas empresariales, aunque no estuvieran relacionadas con la actividad prin-
cipal, sobre todo si se trata de servicios complementarios. El consejo de admi-
nistración y el equipo de directivos se encargan de proponer la estrategia en las
actividades que ya ejerce la empresa y los posibles nuevos negocios. Mi mayor
aportación a la estrategia de la empresa ha sido siempre la de procurar reinver-
tir constantemente los beneficios en nuevos proyectos.
En los momentos actuales, con la crisis financiera que vivimos, se analiza
con mayor profundidad la viabilidad de una nueva actividad, con valentía pero
Joaquín Arias López | grupo vectalia
LA FUERZA DE LA ILUSIÓN Y LA TENACIDAD
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